Alex Lozano, uno de los patrulleros herido en el ataque con un cilindro bomba en el sector de Plan Brisas de Aguazul, murió ayer en un centro hospitalario de Villavicencio, Meta. Es la cuarta víctima fatal.
El patrullero fue atendido inicialmente en el hospital de Yopal por la pérdida importante de tejido en una de sus piernas y posteriormente fue trasladado a la capital del Meta, para ser atendido en una Unidad de Cuidados Intensivos, pero allí su cuerpo no resistió más y falleció.
Lozano, natural de Curumaní, César, deja un niño de dos años y medio huérfano.