La obra, que saldría a licitación en 2018, comunicará Meta, Casanare, Vichada, Guaviare, Huila, Tolima y el Valle del Cauca. Los recursos destinados por el Gobierno Nacional, por medio del Invías, para adelantar los estudios técnicos y de diseño, junto con la interventoría, suman $ 20.673 millones. Los trabajos deberán estar terminados y entregados el 31 de diciembre del 2017.
De hecho, desde hace cinco meses la firma consultora Enrique Dávila Lozano EDL avanza en la revisión y profundización de los estudios de un corredor vial 454 kilómetros con sitio de partida en Palmira, Valle del Cauca, y de llegada en Colombia, que es parte del proyecto llamado Conexión Pacífico-Orinoquia.
El objetivo es establecer cuál es la mejor alternativa y el trazado que debe tener esta autopista nacional, que en su totalidad es clave para la conectividad interdepartamental y regional como La Herrera, población ubicada en la cordillera Central en el Tolima; Colombia, sobre la cordillera Oriental, en el Huila; hasta el municipio de Mesetas, en el Meta.
El objetivo del estudio en desarrollo, teniendo en cuenta las dificultades en la conectividad en sentido transversal entre el suroccidente y suroriente del país, es permitir la construcción de un corredor de mejores especificaciones técnicas, de operatividad y eficiente.
Y además que sea el verdadero enlace entre la Orinoquía colombiana, el Huila y el sur del Tolima con el puerto de Buenaventura, atravesando cordilleras y ríos, y generando una comunicación terrestre que favorezca el desarrollo económico, comercial e industrial de los departamentos del área de influencia, sobre todo de poblaciones golpeadas por el conflicto armado.
De acuerdo con el director de Invías, Carlos Alberto García, hay varias alternativas del trayecto en análisis, indicadas por los estudios previos, que tienen en común el paso por Florida y La Herrera.
El contrato tiene dos partes. La primera corresponde a la complementación y actualización de los estudios que el Instituto realizó en 2011, para el trazado de 270 kilómetros de carretera entre Colombia, con paso por La Uribe, San Juan de Arama y llegada a Mesetas.
La segunda parte tiene que ver con el itinerario definitivo y el diseño estructural de la vía, túneles, viaductos o puentes (es decir, llevar a fase II) que requerirán los 184 kilómetros de corredor que hay entre Florida, Valle – La Herrera (Tolima) – Cruce Bruselas- Aipe (Huila) y el cruce Santa María, Huila.
Sin embargo, los análisis de la Fase II, que es la ingeniería en detalle del proyecto, “determinarán cómo llegar, por ejemplo, a esos puntos”, expresó García.
Además, del desplazamiento final entre Florida y el cruce Santa María, el contratista tendrá que hacer el respectivo diagnóstico de impacto ambiental que se llevará luego a la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
Para complementar parte del tramo en estudio, García informó que el Ejército Nacional está ejecutando las obras viales entre los municipios de Baraya y Colombia, en el Huila.
“Con esta carretera, los Llanos Orientales estarían mucho más cerca al Pacífico colombiano por el Valle del Cauca, lo que representará en recorridos de ida y vuelta grandes ahorros de tiempo, combustible, insumos y aumento de la calidad de vida, productividad y competitividad no solo regionales sino de todo el país”, dijo el Vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras.
Una vez se entreguen los estudios con el recorrido definido de la conexión Pacífico-Orinoquia, el Gobierno Nacional deberá mirar cómo se financiará la construcción, para sacarla a licitación. Y esto sería en el 2018, es lo informado.