‘Los Alacranes’ como fue identificado el grupo delincuencial, serían los responsables de los secuestros cometidos a dos mujeres en Villanueva, una pareja en Monterrey y un ganadero en Tauramena.
En días anteriores, las autoridades habían informado la captura de siete integrantes de esta banda, a las que se suman las cinco capturas recientes, permitiendo desarticular en su totalidad el grupo delincuencial, presunto responsable de varios hechos delictivos en el departamento. La investigación permitió determinar que tenían una estructura fuertemente conformada.
Entre los capturados se encuentra el cerebro y determinador de los secuestros y extorsiones ejecutados por ‘Los Alacranes’; Raúl Antonio Gamba Mora, alias Willy, capturado en San Vicente de Chucurí (Santander), a quien un fiscal logró que le fuera legalizada su captura.
Ante un juez con función de control de garantías. La Fiscalía lo imputó como responsable de los delitos de concierto para delinquir agravado, secuestro extorsivo agravado consumado, hurto calificado, cargos que no aceptó.
Asimismo, fueron capturados el pasado 29 de febrero, Dagoberto Castañeda y Luz Daila Amaya en Villanueva (Casanare) y Villavicencio (Meta) respectivamente, quienes, al parecer, habrían participado en el secuestro de un ganadero del municipio de Monterrey, por quien pidieron dinero por su rescate.
Castañeda y Amaya fueron imputados por un fiscal adscrito a la seccional Casanare, ante un juez con función de control de garantías, como presuntos responsables de los delitos de secuestro extorsivo agravado, porte ilegal armas de fuego agravado y hurto calificado y agravado, cargos que no aceptaron.
Del mismo modo, Wilder Mejía Lascarro fue capturado en la ciudad de Bucaramanga (Santander), al parecer estuvo relacionado con los secuestros presentados en octubre del año inmediatamente anterior en el municipio de Monterrey. Mejía Lascarro, quien se presentaba como líder comunitario, se le imputaron los delitos de concierto para delinquir agravado, secuestro extorsivo agravado y porte ilegal de armas, cargos a los que no se allanó.
A los cinco capturados un juez los cobijó con medida de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario.