Entre los capturados mediante orden judicial se encuentran tres hombres y una mujer. En una diligencia de allanamiento a un inmueble del barrio Villa Belinda de Yopal, se logró la incautación de 45 gramos de marihuana, 12 plantas de marihuana y elementos que servían para la fábrica de cigarrillos.
Personal de la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN) de la policía logró la desarticulación del grupo de delincuencia común organizada “los magos” en un trabajo coordinado con la Fiscalía 33 Seccional, por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Según la fiscalía, este grupo delincuencial se dedicaba al tráfico de sustancias estupefacientes (Marihuana Crippy y Cocaína) en la ciudad de Yopal, en los alrededores de los entornos escolares del Colegio Carlos Lleras Restrepo sede Gabriel García Márquez y Colegio Alianza Pedagógica de la ciudad de Yopal mediante la modalidad de narcomenudeo y a domicilio.
Luego de varios meses de seguimientos y de adelantar varias investigaciones, permitieron al juzgado Promiscuo municipal de Sabanalarga, expedir las respectivas ordenes de captura en contra de cuatro integrantes de la mencionada banda así:
Un hombre de 23 años de edad, conocido como “el chato” quien se desempeñaba como expendedor o distribuidor dentro del grupo de delincuencia común, por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
En la misma acción policial se capturó mediante orden judicial a “la morocha o maruja” mujer de 31 años de edad, quien se desempeñaba como cabecilla del grupo de delincuencia común organizada los magos, por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
También se logró la captura de un hombre de 29 años de edad, conocido como “sebas” quien se desempeñaba como mando medio, solicitado por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Dentro de los detenidos se encuentra “homero” de 24 años de edad, quien se desempeñaba como expendedor o distribuidor de alucinógenos, por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Esta operación se desarrolló gracias a los planes enmarcados en democracia segura y que pretenden reducir el tráfico de estupefacientes en menores cantidades en el departamento de Casanare.