Después de observar lo ocurrido con varios concursos este año en Casanare, – Contraloría Departamental, Personerías incluso Yopal y algunas ESES; – sin hache y con s, para evitar malos entendidos- ; creo que estamos perdiendo la oportunidad de que en otras latitudes aprovechen nuestra experiencia. Podríamos incluso asesorarlos en el tema, con el método implícito en todos ellos, Se puede intentar patentarlo previamente. Sugiero posteriormente montar un video para subirlo a internet en alguna página oficial con su respectivo link o que aparezca en “ youtube” tendría garantizado miles de visitas o en MNS el múltiservicios de Microsoft Network . Propongo como título de “Diez consejos, –con s para evitar malos entendidos-, repito “Diez consejos para organizar un concurso público de méritos y obtener el resultado deseado”.
El libreto y discurso es lo que importa, se pueden cambiar los protagonistas y las locaciones.
UNO. Hay que contratar con una universidad de poca experiencia en el tema, no importa si son señaladas por escándalos, clientelismo etc.; ellas generalmente saben cómo hacer estas vueltas. Ojo, no se debe incurrir en el error de contratar a la ESAP o NACIONAL así sean gratuitas, porque la vaina se sale de las manos. No debe importarnos que el hecho despierte sospechas.
DOS. Capacidad de disposición en los ejecutores para realizar “maniculiteteo” del concurso y de los concursantes. Sin agüero alguno y al vaivén de las circunstancias.
TRES. Un alto funcionario sea hombre o mujer que se encargue de defender los cambios introducidos al concurso contra viento y marea. Ojalá inicie sus declaraciones agradeciendo a Dios, usar palabras como: transparencia, legalidad o sinónimas y que además improvise con remates de este estilo: “Nosotros tenemos idoneidad y hacemos patria . Los demás nos están calumniando con base en chismes, los retamos a que denuncien y por favor que no nos hagan más daño”.
CUATRO. Se debe estar preparado para la presentación de tutelas tratando de detener el concurso o para restablecer el desconocimiento de derechos de los concursantes. No hay que tomárselo a pecho, sino contestarlas. Hay que emular seguridad a pesar de los errores cometidos.
CINCO. Competencia y disposición antes de que salgan los fallos judiciales, de crear situaciones administrativas de hecho, que dificulten el cumplimiento de eventuales sentencias negativas.
SEIS Ante la pérdida de tutelas por parte de concursantes que ocurre generalmente; aptitud y actitud para aprovechar el “papayaso”. En los medios de comunicación de manera firme y vehemente matonear a quienes las presentaron por “ignorantes y malintencionados”.
SIETE. Montar “veedurías ciudadanas”, ojalá en cabeza de docentes; que por debajo de cuerda estén a favor de los organizadores. Suelen dar muy buenos resultados.
OCHO. Ante la presentación de demandas invocando la medida de suspensión provisional. Tu tranquilo, generalmente los jueces no la decretan. No olvidar que la justicia está congestionada por lo que hay alta probabilidad de desempeño del cargo cuestionado por una buena parte del periodo, que es lo que importa. Favor no perder la perspectiva.
NUEVE : Si la situación se complica; contra planteamiento de figuras jurídicas atrevidas como “revocatoria de la revocatoria” , o de cualquier recurso así no estén en la ley, como el de “ reculación” o derecho al pa´traseo o darles de su mismo caldito a los concursantes presentando acciones de tutela. Sí los jueces llaman la atención por la temeridad de las actuaciones o les imponen multas, hacerse los locos; en las nuevas por reparto es difícil que conozcan las anteriores.
DIEZ. Sí al final les dan la razón a los demandantes que importa, ya no se pierde mayor cosa. Sí hay antecedentes judiciales negativos para un caso. “Vale huevo” vuelve y juega. Cada encerrona a la meritocracia paga. Solo deseo sinceramente que ninguna vez les pase esto a los hijos de ellos. No les serviría ningún consejo, – con s para evitar malos entendidos-.
Miguel Alfonso Pérez Figueredo.