Temida ley en Casanare de las Zonas de Interés de Desarrollo Rural, Económico y Social, Zidres, será sancionada hoy a las 11 de la mañana por el presidente Juan Manuel Santos en Orocué, Casanare.
Con una gran comitiva de ministros, personalidades no definidas, políticos y académicos se harán los actos protocolarios de esta ley que, según comunicado emitido por la Asociación por la Defensa de Casanare, pretende despojar al campesino casanareño de sus propias tierras y labores.
Mientras tanto para el gobierno nacional la ley “busca convertir en zonas productivas áreas geográficas que se encuentren aisladas de los centros urbanos más significativos, que demanden elevados costos de adaptación productiva por sus características agrológicas y climáticas, y que tengan baja densidad poblacional, presenten altos índices de pobreza o carezcan de infraestructura mínima para el transporte y la comercialización de los productos” y agrega que se habilitarán más de 7 millones de hectáreas para la producción de alimentos y recursos forestales.
Para la Asociación por la Defensa de Casanare con esta ley se “pretende entregar a grandes emporios comerciales como Manuelita o Riopaila el uso de grandes extensiones de miles de decenas de hectáreas, sin importar si estas tierras ya venían teniendo uso ganadero o agrícola diferente”.
Y agrega que “cabe recordar que unas 400 mil hectáreas ya tienen restricción por estar a menos de 2.5 kilómetros de pozos petroleros y 148 mil son reservas indígenas. Sin embargo estas como 250 mil hectáreas de áreas de protección no están definidas en su manejo especial y podrán ser ofrecidas con esta LEY, a multinacionales a cambio de operarlas con proyectos agrícolas extensivos de monocultivos como la palma, que hacen un tremendo daño al ecosistema y al mismo trabajo del campesino casanareño.
La organización no gubernamental expresa que “con la Ley 160 o de reforma agraria, existe otra restricción al campesino que no puede superar en titulación de una Unidad Agrícola Familiar, o área de terreno que va de 30 hectáreas hasta 700 pero si excede aunque sea una, no puede serle titulada, a cambio, esta ley abarcaría en un solo cultivo inclusive hasta más de 100 mil hectáreas de sorgo, palma o maíz, creando un tremendo impacto ambiental en flora y fauna, pero sobre todo en el agua. En el uso y posesión nueva de las tierras y su vida, dejando al campesino al “servicio” de estas megaempresas, tenga o no conocimiento y capacidad para adelantar estas tareas”.
Datos de contexto
Según la Asociación por la Defensa de Casanare este departamento tiene un área de 4 millones 466 mil hectáreas y de ellas apenas 2 millones 600 están tituladas. Igualmente destaca que Casanare tiene 1 millón 800 mil hectáreas baldías, una denominación que no corresponde a tierras con sana posesión, donde toda está ocupada y por herencia o algún tipo de transacción comercial, toda tiene dueño. De ellas, 600 mil no se pueden tocar por tener cédulas reales (documentos del siglo pasado), que perjudican ya en gran manera la ganadería como en Hato Corozal.
También se destaca que hay 7.933 predios en Casanare que están sin titulación y que está estancadas desde hace 10 años sin que el Incoder o cualquier otro ente, les haga trámite, perjudicando a los campesinos, y con esta propuesta Zidres, sus tierras estarían en la deriva y a punto de perderse.
Senador Jorge Prieto decidió no asistir al evento protocolario por no estar de acuerdo con la ley zidres y expresó en un comunicado que “los llaneros que han trabajado durante décadas la tierra por sus propios medios, aguantando la absoluta ausencia del Estado y suplicando por la titulación que nunca llegó, NO estamos dispuestos a aceptar que sean grandes industriales quienes reciban los incentivos del gobierno para la explotación de la tierra, desplazando a los campesinos agricultores y ganaderos del Llano”.
El exdiputado Ramiro Rivera también viene liderando la creación de una organización que defienda a Casanare de los efectos de la ley zidres. Ayer realizó una gran reunión en Paz de Ariporo.