Defensor del título perdió 4-1 contra Cerro Porteño en Paraguay. Fracaso para el DT Gustavo Costas.
Muy poco duró la ilusión de poder defender el título de la Copa Suramericana. Santa Fe perdió 4-1 en su visita a Cerro Porteño, en una noche tan gris en su desempeño como la pantaloneta que lució en el estadio Defensores del Chaco, de Asunción (Paraguay) y quedó al margen del torneo continental.
Y fue muy poco, porque su deseo de avanzar en el torneo comenzó a desvanecerse apenas a los dos minutos de juego, cuando en una imprudencia de Juan Daniel Roa cometió falta en el área sobre Pablo Velázquez. El juez central argentino Patricio Loustau no dudó en sancionar la pena máxima, que Cecilio Domínguez cambió por su primer gol de la noche.
Entraron dormidos
Cerro Porteño, con la garra que le caracteriza, mostró un juego frenético y ofensivo, con la idea de asfixiar y dejar sin salida al equipo que la semana pasada lo había vencido por 2-0 en el estadio de Techo, en Bogotá.
Prueba de ello es que en la segunda llegada del equipo asunceño a predios del rojo capitalino, cuando transcurría el minuto 9 de juego, un centro por el costado derecho, origina un doble cabezazo en el área que termina en gol. Tesillo perdió en la marca y luego, López se queda prácticamente mirando a Domínguez, quien saltó, cabeceó y colgó al arquero Zapata.
Para completar la pobre presentación en el primer tiempo, y cuando Santa Fe intentaba reaccionar, en otro centro por la franja derecha, Roa dejó el rebote servido para que Silvio Torales marcara el tercero de la noche para Cerro, con el que comenzó a perfilar no solo su clasificación sino además la eliminación de un campeón que estuvo deslucido y lejos de lo que había mostrado en sus últimas tres presentaciones.
Con un contundente 3-0, Costas debió replantear en el intermedio a sus dirigidos, pero se quedó en apenas eso, en ganas, sin orientación y sin guía. La reacción fue tenue, con lo poco que pudo hacer Osorio en el frente de ataque. El técnico fue arriesgado al ingresar a Plata en sustitución de Gordillo y luego a Perlaza por Ómar Pérez.
Minutos de vida
En ese momento un gol del equipo cardenal le daba el pase a cuartos. Y como por variar no hay partido de Santa Fe en el que el drama y el sufrimiento cobren un sentido de pertenencia, tanto para jugadores, como técnico y afición. Y anoche, no fue la excepción.
Un gol de penalti convertido por el argentino Jonatan Gómez, a los 77 minutos, le dio al rojo capitalino la válvula de oxígeno y vida, cuando su muerte y acta de defunción estaba firmada en la Copa Suramericana. Pero la vida se extinguió al final.
Once minutos después, Domínguez, quien fue la figura del partido, le dio la estocada al vigente campeón, con buena parte de culpabilidad de la defensa. Una noche para el olvido.
De todas maneras, fracaso para el técnico argentino, que solo dirigió dos partidos en el torneo continental y salió despachado.
La cuota colombiana
Ahora, el equipo capitalino deberá enfocarse en la búsqueda de la clasificación en la Liga.
Con la eliminación de Santa Fe, la cuota colombiana en los cuartos de final de la Copa Suramericana queda por cuenta de Atlético Nacional, Independiente Medellín y Junior de Barranquilla, estos dos últimos que avanzaron con drama a la siguiente fase. Deportes Tolima ya había sido el primero en quedar al margen del certamen.
JAVIER ARANA
Redactor de EL TIEMPO
En Twitter: @arana_javier