El reporte ciudadano indica que los ladrones llegaron hasta una finca en la vereda Carrastol durante la noche del pasado 24 de julio hasta donde carnearon una res y dejaron otra lista para sacar, pero no pudieron llevarse.
Los propietarios hallaron los restos de una novilla mientras la otra tenía un lazo en la cabeza amarrada cerca de la cerca que da a la vía de acceso.
“La delincuencia se ha tomado el municipio y no hay autoridad que pueda controlarla” manifiesta una de las personas del sector que ve con preocupación el avance de la delincuente que ha llegado a lugares donde nunca se pensó que existiría algún día, tal nivel de inseguridad.